Los miradores están destinados a la observación del paisaje. Hay 7 miradores repartidos por el paraje, de madera y con varias alturas.
Desde el mirador cercano al búnker se puede contemplar la depresión central del paraje, con los saladares bordeando la charca central y las lomas que la rodean.
Avanzando unos pocos metros más en la ruta nos encontramos con otro mirador, el llamado mirador de la charca central desde el que se contempla mejor parte de la misma.
Desde la torre o mirador de madera más alto se puede contemplar una charca pequeña natural situada al noroeste del paraje.
El mirador descubierto facilita una panorámica de las lomas del noroeste del paraje así como de los núcleos del Altet y parte de la ciudad de Alicante.
Desde el mirador de Balsares se observan las lomas del sureste del paraje y el núcleo de Balsares.
Desde el Mirador cercano a las trincheras se puede contemplar parte de otra pequeña charca natural del paraje, la charca suroeste, y otra cercana ya en Sta. Pola, la de Torre Brissó.
El Mirador de la charca de anátidas es una explanada ancha desde la que se observa el área norte de la charca y también las aves que en ella habitan.
[line_dotted]Los observatorios se crearon para poder realizar observaciones de las aves desde más cerca. Hay tres observatorios en el paraje:
- Observatorio de la charca de anátidas, desde el que observaremos aves como las gallinetas, fochas, azulones, porrones y con suerte malvasía y cerceta pardilla, entre otras.
- Observatorio en la charca de limícolas desde el que observaremos aves que necesitan poca profundidad de agua para vivir: cigüeñuelas, chorlitejos, correlimos, agachadizas…
- Observatorio de la charca central, desde el que observamos el área sur de la charca, donde podemos encontrar andarríos, cigüeñuelas, cercetas…